A través del estudio titulado “¿Es la nitrosación un mecanismo importante de secuestro de nitrógeno en los bosques templados del sur de Chile?”, el investigador busca probar que, al igual que el secuestro de carbono en el suelo, existe un mecanismo de secuestro de nitrógeno en los suelos forestales del sur de Chile, consigna la nota publicada por la Ufro.
Según el Dr. Matus, en los ecosistemas chilenos forestales este mecanismo existe y genera una retención de nitrógeno inorgánico con menores posibilidades de pérdida (lavado desde el suelo), lo cual es bueno y despejaría parte de la incógnita, pero a su vez también se generan gases de efecto invernadero, causados por las altas precipitaciones de los bosques de pre-cordillera.
“Hemos realizado algunas pruebas en suelos de los bosques andinos y costeros y en ambos hemos constado que aproximadamente un 34 % del nitrógeno inorgánico aportado se incorpora a la materia orgánica. Es la hipótesis que en 2003 científicos norteamericanos levantaron y que hoy nosotros, finalmente, estamos probando y que hasta el momento no ha sido confirmada”, señala.
Relevancia
La idea que maneja el investigador es que, por la gran cantidad de precipitación en los bosques de altura, sobre todo en el sur de Chile, hay períodos donde el suelo permanece gran parte del tiempo saturado. Bajo esta lógica, Matus propone que existe un mecanismo de retención de nitrógeno que se puede visualizar como otra variable de estado: “una nueva cajita del ciclo del N” y esa cajita es un proceso abiótico donde el nitrógeno inorgánico es transformado y acumulado a un N orgánico, es decir donde se produce el secuestro de N.
En la nota publicada por la Ufro se explica que sabiendo la existencia de este mecanismo se tiene una herramienta de predicción, por ejemplo respecto a la cantidad de N retenido y lo que se puede perder como gas de efecto invernadero.
Lo que viene ahora es cuantificar in situ el proceso, ya que los experimentos anteriores fueron realizados bajo condiciones controladas de laboratorio. “Esperamos que el proceso estudiado en laboratorio sea parte importante de la retención N y pérdida del mismo (gas efecto invernadero) acoplado a las pérdidas de carbono (emisión de CO2) bajo condiciones de bosque nativo”, comentó el investigador.